Resultados del Índice de Percepción de Corrupción 2014. El crecimiento transparente en riesgo

La organización Transparency International realizó la 20° medición del Índice de Percepción de Corrupción a nivel global. Los resultados del mismo pusieron de manifiesto, una vez más, que en gran cantidad de países encuestados aún queda mucho por hacer en materia de transparencia y lucha contra la corrupción. Entre éstos se encuentra la Argentina, que volvió a obtener una mala nota cayendo de posición en los rankings global y regional.
El estudio anual establece un ranking según el puntaje obtenido entre 0 y 100 puntos entre 175 países sobre el nivel de percepción de corrupción en el sector público. La tabla se elabora a partir de las opiniones de expertos sobre la temática en el sector público con encuestas realizadas entre empresarios, dirigentes, analistas y diversas entidades sociales.
Se puede obtener un buen resultado cuando existen mecanismos de gobierno abierto a través de los cuales el público puede exigir que sus líderes rindan cuentas, mientras que una mala puntuación evidencia un contexto donde prevalece el soborno, los actos de corrupción quedan impunes y las instituciones públicas no dan respuesta a las necesidades de los ciudadanos.
Resultados globales
Dinamarca se ubicó como la nación con mejor reputación, con una puntuación de 92; mientras que Corea del Norte y Somalia compartieron el último lugar, con apenas ocho puntos.
Más de dos tercios de los 175 países incluidos en el Índice de Percepción de la Corrupción 2014 obtuvieron una puntuación inferior a 50, en una escala de 0 (altos niveles de corrupción) a 100 (bajos niveles de corrupción).
Algunos de los descensos más marcados, de entre 4 y 5 puntos, fueron China (36 sobre 100), Turquía (45) y Angola (19), a pesar de haber tenido un crecimiento económico promedio de más del 4 por ciento en los últimos cuatro años.
La corrupción es un problema en todas las economías, y hace necesario que los principales centros financieros en la UE y EE. UU actúen de forma coordinada con economías de rápido crecimiento para impedir que los corruptos se salgan con la suya, indicó hoy la organización contra la corrupción Transparency International.
El Índice de Percepción de la Corrupción 2014 pone de manifiesto que, cuando líderes y altos funcionarios abusan de su poder para usar fondos públicos en beneficio propio, el crecimiento económico se ve minado y los esfuerzos por frenar la corrupción quedan frustrados, señaló José Ugaz, presidente de Transparency International.
En aquellos países que se ubican en puestos rezagados, como el nuestro, la corrupción afecta directamente la calidad de vida de las personas indicó Pablo Secchi, Director Ejecutivo de Poder Ciudadano, Capítulo Argentino de Transparency International.
La organización impulsa actualmente una campaña a nivel mundial para Desenmascarar a los Corruptos, que exhorta a la Unión Europea, Estados Unidos y países del G20 a seguir el ejemplo de Dinamarca y crear registros públicos que permitan saber con certeza quiénes verdaderamente controlan cada sociedad o son sus beneficiarios finales.
Los resultados para Argentina
Nuestro país volvió a caer en el ranking que expone la percepción que se tiene sobre actos de corrupción. Según la medición de la organización no gubernamental Transparencia Internacional, el país, con 34 puntos sobre 100, ocupa el puesto 107 sobre los 175 países evaluados, un lugar debajo del que ocupaba hace un año.
Éste es el tercer descenso de manera consecutiva; en 2012, el Estado nacional ocupaba la posición 102. Así, la Argentina superó ampliamente la media para colocarse en el pelotón de países con mayores índices de corrupción del mundo.
En el ranking regional ocupa el vigésimo segundo puesto (22°), Uruguay, Chile, Brasil, Perú, Colombia, Bolivia y México. Sólo fue superada por Ecuador, Paraguay y Venezuela, que está al fondo de la tabla.
Este estancamiento, incluso pequeña caída en el índice, refleja la total ausencia de esfuerzos en nuestro país en materia de lucha contra la Corrupción. Los organismos de control fueron reducidos a su mínima expresión durante los últimos años, convirtiéndolos en actores intrascendentes, sostuvo Pablo Secchi, en referencia a estos resultados negativos.
A modo de conclusión Secchi remarcó que la impunidad es quizás uno de los mayores desafíos en la lucha contra la corrupción. La impunidad que existe en Argentina es un incentivo para aquellos que quieren hacer uso privado de la administración pública.
Consulte los resultados completos aquí.
Contacto para prensa: Pablo Secchi (pablosecchi@poderciudadano.org) Cel: 1551147200