Sobre la integridad necesaria para ocupar un cargo en la Corte Suprema de Justicia

16. 04. 2024

Desde Poder Ciudadano consideramos que la confianza en la imparcialidad y rectitud de quienes integran la Corte Suprema de Justicia de la Nación es esencial para la legitimidad del sistema judicial en su conjunto. Cualquier duda o cuestionamiento sobre la integridad de una candidatura puede socavar la credibilidad de la institución y afectar su capacidad para impartir justicia de manera imparcial y equitativa.

Instamos al Presidente de la Nación a considerar estos principios en la selección final de las candidaturas, asegurando así la excelencia y la legitimidad de nuestra más alta instancia judicial.

Por otro lado, entendemos que la ausencia de mujeres en el cuerpo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación socava los avances que se dieron en materia de igualdad durante los últimos 20 años. Desde 2004 hasta 2018, Argentina tuvo al menos una mujer como integrante de la Corte Suprema de Justicia, lo que reflejó los avances en términos de equidad de género en la justicia del país. Por esto, debe considerarse lo que indica al respecto el Decreto 222/03:

“Dispónese que, al momento de la consideración de cada propuesta, se tenga presente, en la medida de lo posible, la composición general de la CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA NACIÓN para posibilitar que la inclusión de nuevos miembros permita reflejar las diversidades de género, especialidad y procedencia regional en el marco del ideal de representación de un país federal”.

Argentina cuenta con juristas de gran experiencia y renombre que pueden ser parte de la Corte, por lo que instamos al Presidente a presentar el pliego de candidatas para ocupar estas vacantes y apuntar a la paridad de género.

Por último, es indispensable que la designación de los/las integrantes de la Corte Suprema sea de profesionales intachables, que cuenten con un amplio consenso político y social que permita garantizar la estabilidad y legitimidad del máximo Tribunal del país, fortaleciendo su independencia y su capacidad para actuar como garante de los derechos y las libertades fundamentales de toda la ciudadanía.

En los próximos días, haremos llegar nuestras objeciones particulares a las postulaciones en curso, durante el proceso de apertura a la consideración pública que se abre a partir de las nominaciones formales de las candidaturas.